De vez en cuando hay que hacer de abogado del diablo y mirar las cosas desde nuevos ángulos.
Ayer nos aproximamos a la idea de amor/San Valentín desde el punto de vista de la literatura. Pretendíamos escapar de los tópicos más manidos pero... ¿podemos ir más allá?
Pues sí. Hoy defendemos desde este blog que el amor nos puede valer para estudiar latín, bioquímica y matemáticas. ¿Cómo?
Una alumna de Cultura Clásica está trabajando sobre un pergamino en latín de temática amorosa.
Por otro lado hay quien pretende desmitificar el amor, convirtiéndolo en una serie de reacciones químicas de las que no podemos escapar (véase el documento siguiente).
DOCUMENTO (De los profesores Ramón y Eugenia).
Y la curva cardioide, con esta ecuación y esta representación gráfica, nos remiten a matemáticas más avanzadas.
Y la curva cardioide, con esta ecuación y esta representación gráfica, nos remiten a matemáticas más avanzadas.
¿Dónde quedan entonces el libre albedrío y el romanticismo?
¿Cuál es el enfoque más certero? Difícil cuestión. Depende del momento y las circunstancias.
Y tú... ¿con qué te quedas?
En todo caso si puedes, sea el amor lo que sea, disfrútalo. Nunca se sabe cuándo volverá a pasar por tu lado.
Ayer me llegó otra curva plana para un 14 de Febrero friki. Se llama Curva de Cupido, y podéis acceder a ella desde esta URL: http://www.wolframalpha.com/input/?i=cupid+curve
ResponderEliminarUn saludo a todos y pasad un buen fin de semana.